Saturday 13 October 2012

"Frankenweenie" por Tim Burton

“Esto no es un experimento; es mi perro”


“Frankenweenie” es una película en monocromo de animación en IMAX 3D dirigida y producida por Tim Burton en 2012. Su duración es de 87 minutos aproximadamente. Se estrenó el 5 de octubre de 2012 en Estados Unidos y el 11 de ese mismo mes en España.


La historia está basada en un cortometraje de treinta minutos que dirigió e ideó el propio Tim Burton en 1984, aunque en este caso no se trataba de una animación. De hecho pienso que la cinta de 2012 es una simple extensión del guion para convertirlo en largometraje.



La trama de la película se podría resumir con las siguientes palabras: un niño llamado Víctor, que vive en Nueva Holanda, pierde a su querido perro Sparky, y aprovecha los conocimientos de las clases de ciencias para intentar que vuelva a la vida y así recuperar la felicidad perdida.

“Cuando pierdes un ser querido, nunca vuelve a abandonarte”

El título de la película hace referencia directa a “Frankenstein”, ya que ambas historias tienen en común el mito prometeico de la creación, o mejor dicho, la resurrección.  De hecho, los padres del protagonista se llaman señor y señora Frankenstein, y Perséfone, otro personaje canino, que  tiene la apariencia de la mujer de Frankenstein (véanse imágenes inferiores).



Además considero fundamental destacar el constante homenaje que hace Tim Burton a la historia del Cine tanto en el cortometraje como en su remake. Películas como “El hombre lobo” o “Drácula” son mencionadas sutilmente. En el cortometraje se puede ver la figura del Pato Donald en un recipiente de zumo de naranja, mientras que la taza del desayuno es del Hombre Lobo. Lo mismo ocurre con el personaje de “Hello Kitty” en ambos metrajes. En el segundo es interesante el momento en el que Víctor está escavando en la tierra y la sobrante la amontona sobre la tumba de Hello Kitty.
El mérito más relevante de la película es haber trasladado un cortometraje con actores a un largometraje con figuras modeladas y grabado con la técnica “stop-motion”, esto es, la sucesión de fotografías para ser proyectadas a una velocidad determinada y así dar la idea de movimiento con objetos inanimados. Esta técnica, que ya se inventó con los orígenes del cine, requiere de mucho trabajo y dedicación, y eso es algo que no le ha faltado al equipo de Tim Burton.

En lo que respecta al guion, nada se ha eliminado del original, simplemente se han añadido algunas escenas y complementado otras.

Como ocurre en la mayoría de obras de la filmografía de Tim Burton, es indiscutible que la personalidad de los personajes marca la diferencia. Esto es aún más visible en el largometraje, pues se ha reforzado la expresión de la peculiaridad de cada personaje. Se podría decir que todos los que aparecen tienen en común la personalidad oscura y un tanto tenebrosa, y precisamente por eso tiene sentido que la película sea en blanco y  negro. Como ejemplo quiero destacar a “niña rara”, como la ha llamado Burton (véase imagen inferior).



En la dirección, que es la tarea que Burton se reserva, es quizás de los elementos que más han variado con respecto al cortometraje homónimo. Pienso que la técnica está mucho más desarrollada, depurada y perfeccionada en el largometraje. Es como si Tim Burton hubiese pensado en el cortometraje como un boceto para la obra final; el largometraje. Cabe destacar de la realización varias transiciones asombrosamente planificadas y puestas en conexión. En mi caso, mereció la pena pagar el precio de la entrada solo para ver estos artificios que os llamarán la atención en cuanto los veáis. Algo que quizás pudiera mejorarse es el momento en el que Sparky se muere. En ese instante no hay tanta dramatización como podría tener para aportar más interés al espectador. Cabe la posibilidad de que el director estadounidense lo haya hecho con el propósito de hacer el relato más aceptable para el público de menor edad.

Teaser poster de "Frankenweenie"

Quizás el mayor problema de esta película es que habiendo visto el cortometraje ya conoces de antemano lo que va a suceder. Es como ver una película por segunda vez; te puede sorprender pero nunca te sorprenderá como la primera vez. En el caso de que no hayáis visto el cortometraje, no dudéis en ir a ver la película porque lo merece.

Seguramente habrá personas que piensen que es demasiado surrealista o que tenga demasiada fantasía, pero para comprender realmente “Frankenweenie” hay que tener el espíritu de un niño, como Víctor.
“La ciencia no es buena ni mala, Víctor, pero se puede usar de las dos formas”



Espero que os haya gustado esta crítica y os haya incitado a ver la película y así tener vuestra propia opinión. A continuación podéis ver el enlace a la página oficial de Disney, donde podéis encontrar más información sobre la película:

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